En lo que va del presente año, la delegación estatal de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) ha efectuado entre seis y siete inspecciones extraordinarias a la refinería Miguel Hidalgo, en Tula, luego de registrarse accidentes en el complejo petroquímico.

Así lo señaló el titular de la dependencia, Daniel Lara Baños, quien aclaró que ninguno de los accidentes suscitados, dos en las últimas semanas, ha tenido consecuencias fatales; es decir, no han implicado la muerte de algún trabajador.

De acuerdo con la dependencia federal, de 2013 a 2015 se han efectuado 40 inspecciones a la refinería Miguel Hidalgo en todas sus áreas y en distintas materias, como en Seguridad e Higiene.

No obstante Lara Baños indicó que estas inspecciones no tienen qué ver precisamente con accidentes laborales.

De las 40 inspecciones que se realizaron durante ese periodo, 21 son extraordinarias.

El exdelegado de la Secretaría de Gobernación en la entidad explicó que los procedimientos derivados de las inspecciones extraordinarias que se han realizado a la refinería de Tula durante este año continúan abiertos, pues la empresa, en este caso Pemex, deberá entregar a la autoridad laboral la información requerida para determinar si cumple con las medidas de seguridad.

Lara reconoció que la delegación de la STPS no lleva a cabo inspecciones en todas las áreas de la refinería Miguel Hidalgo, sino sólo en donde llega a producirse un accidente, ya que, dijo, verificar todos los departamentos de la planta llevaría meses.

El funcionario federal rechazó que exista un patrón de deficiencias en la refinería, que haya motivado las inspecciones extraordinarias en lo que va del año, así como los accidentes registrados.

Además, aseguró que la empresa lleva procedimientos muy rigurosos con su personal cuando se registra un accidente, a fin de deslindar cualquier tipo de responsabilidad, por lo que los motivos pueden ser tanto errores humanos como causas naturales.

Daniel Lara admitió que ha habido errores, de ahí los accidentes, pero, subrayó, existe comunicación constante para velar por la seguridad de los trabajadores, “la empresa tiene estándares muy altos para la seguridad de sus trabajadores”, afirmó.

“Estamos coordinados con la empresa del estado para ir solventado todas las irregularidades e ir regularizando su normatividad y el cumplimiento de la misma”, aseguró.

Por otra parte, en cuanto al manejo de los accidentes, el titular de la STPS en Hidalgo hizo un llamado tanto a Pemex como a todas las empresas, a efecto de permitir el ingreso de personal capacitado para actuar en situaciones de riesgo, como cuerpos de Protección Civil o Bomberos.

El delegado de la STPS resaltó que es una obligación de las empresas permitir el ingreso de expertos en caso de accidentes para evitar una situación de mayor riesgo.

“Es obligación dejar entrar a las autoridades competentes en caso de accidente, para evitar un accidente mayor por negligencia y haya consecuencias fatales para los trabajadores”, subrayó.

Lara Baños reiteró el llamado a todos los centros de trabajo para facilitar la labor de las autoridades, en primera instancia a Protección Civil y Bomberos, y en segunda al Ministerio Público, en caso de ser necesario, para generar un estudio integral que coadyuve a la resolución de un accidente o contingencia.

“Esto con la finalidad de ayudar a las empresas a mejorar sus procesos y evitar accidentes posteriores”, abundó.

Del 21 de septiembre al 1 de octubre del presente año se han registrado dos incidentes en la refinería Miguel Hidalgo de Tula.

En el primero de ellos, Pemex informó que presentó una fuga e incendio en el calentador BA-701 de la U-700-1 (diésel) en el sector 1 de la refinería, por lo que de inmediato se activó el plan interno de respuesta a emergencias para aislar el incendio y dejar la planta en posición segura. Derivado de ese incidente, se reportó una trabajadora lesionada.

En el segundo, Pemex dio a conocer que una interrupción en el sistema de distribución de energía eléctrica de la refinería provocó el paro seguro de las plantas de proceso y desfogues controlados a la atmósfera.

De inmediato, se activaron los sistemas que llevan a las plantas a una posición segura, De acuerdo con los procedimientos de seguridad establecidos, informó Pemex.

Dicha situación no representó riesgo para la población, aseguró la empresa. Agregó que no se registran daños al personal ni a las instalaciones.