Del presupuesto de Hidalgo, 75 por ciento corresponde a aportaciones y participaciones de la federación, 20 por ciento de otras transferencias y solo 5 por ciento a ingresos propios.

Además, los ingresos estatales por impuestos son menores a 4.8 por ciento, de acuerdo con un análisis del Centro de Estudios de las Finanzas Públicas (CEFP), organismo que recomendó a Hidalgo y al resto de las entidades, fortalecer su política de recaudación y con ello mejorar y eficientar el gasto público.

El ingreso federalizado de Hidalgo es mayor que 80 por ciento. Las entradas por financiamiento corresponden a 3.8 por ciento; las transferencias, subsidios y otras ayudas, 59.3, y los recursos asignados a municipios hidalguenses, 15.

Hidalgo ejerce 4.6 por ciento de su presupuesto en servicios personales; 8.6, en gasto operativo; 2 por ciento, en inversión pública, y 4 por ciento en deuda pública.

El organismo económico refiere que las entidades federativas dependen mayoritariamente de los ingresos que reciben de la federación para elaborar su presupuesto anual.

Lo anterior, añade, implica que cualquier externalidad que afecte las finanzas públicas nacionales, como choques en la actividad productiva o en el precio del petróleo, podría ocasionar que las entidades tengan menos ingresos si esos fenómenos son persistentes.

Por ello, recomienda a los estados fortalecer su recaudación, ampliar su base tributaria y en mejorar la política de ingresos para mejorar su porcentaje de recursos propios.

El CEFP sugiere a las demarcaciones el mejoramiento de la eficiencia en la recaudación propia, fortalecer la modernización catastral, ampliar las capacidades tributarias del gobierno local, dar incentivos a la formalidad e impulsar las asociaciones público-privadas.

Yuvenil Torres I Pachuca