En el Día Internacional del Cáncer Infantil, que se conmemoró ayer, Criterio entrevistó en Tula a Montserrat Anahí, una niña de 11 años que en 2018 fue diagnosticada con leucemia.
“Fue a inicios del año pasado cuando empecé a sentirme mal y a bajar de peso. En un inicio no sabían que tenía, pensamos que era normal que estuviera pasando esto porque estaba creciendo, pero un día me desmayé y fue cuando me hicieron estudios en los que me diagnosticaron anemia y luego leucemia”, dijo la menor.
La infante, quien lleva alrededor de ocho meses en tratamientos de quimioterapia, afirmó que confía que la medicación que le proporcionan los doctores y las enfermeras le ayudarán a mejorar su salud.
“Acabo cansada con el tratamiento, pero es por mi bien y estoy segura de que me voy a sanar. Sé que tengo muchas cosas que hacer todavía en la vida, por ello todos los días le pido a Dios me mande alivio”, comentó.
La paciente es la menor de tres hermanos, y le gustaría ser doctora cuando crezca para ayudar a las personas que tengan alguna enfermedad.
“Mi familia me echa muchas porras; sé que juntos vamos a salir de esto. En ocasiones me desanimo porque el tratamiento es doloroso, aunque los médicos y las enfermeras se portan muy bien. Eso me alienta, porque me dicen que soy valiente al enfrentar mi enfermedad”, agregó.
A pesar de que Tula tiene una unidad oncológica en el hospital general, los padres de Montserrat dijeron que recibe atención médica en Pachuca, pues consideran que los médicos de la ciudad están mejor preparados y que hay buena atención por parte del personal de sector salud.
Jesús González l Tula
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