En el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Discriminación Racial, celebrado el viernes pasado, Luis Cresencio Sandoval González, secretario de la Defensa Nacional (Sedena), autorizó la nueva disposición en “apego al principio de no discriminación”, con el fin de que el Ejército y la Fuerza Aérea estén acorde con la actualidad de la sociedad.
La dimensión máxima de los tatuajes del aspirante debe ser de 10 x 10 centímetros y no deben estar en lugares visibles con el uso del uniforme: manos, brazos, cuello y cara, según El Universal.
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Las imágenes tatuadas no deben ser ofensivas a la moral y/o hacer apología al delito.
El artículo 21 del Reglamento de Reclutamiento de Personal para el Ejército y Fuerza Aérea Mexicano, en su fracción segunda, prohíbe a los aspirantes tener tatuajes y perforaciones en cualquier parte del cuerpo, lo cual tendrá que ser derogado por las autoridades castrenses.
Con información de El Universal
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