El presidente Andrés Manuel López Obrador delineó este miércoles los posibles “delitos” de los que podría acusarse a sus antecesores, para ser juzgados, en caso de que así se decida en una consulta ciudadana.
En conferencia matutina, en Monterrey, advirtió que habría que preguntar a la población si se debe juzgar al expresidente priista Enrique Peña Nieto por corrupción, y al exmandatario panista Felipe Calderón por convertir al país en un cementerio.
Al enumerar a cada uno, planteó la posibilidad de juzgar al también panista Vicente Fox por traicionar a la democracia e imponer mediante un fraude electoral a Calderón, su sucesor.
En el caso del expresidente priista Ernesto Zedillo, consideró que la pregunta sería sobre la decisión de convertir la deuda de unos cuántos en la de todo el país, por el millonario rescate a los bancos, a través del Fobaproa.
Finalmente, planteó que en el caso del también priista Carlos Salinas de Gortari, la consulta sería sobre si debe ser juzgado por entregar empresas públicas a particulares y allegados.
Sin embargo, el tabasqueño adelantó que la consulta sobre la posibilidad de enjuiciar y castigar a los expresidentes sólo podrá concretarse hasta que el Congreso realice las reformas que se requieren para eliminar las trabas a ese ejercicio.
Insistió en que, desde su punto de vista, es necesario someter a juicio al régimen neoliberal y a los de arriba, sin pensar en chivos expiatorios.
“Más que encarcelar a estos personajes, porque eso nos llevaría a la confrontación y a la polarización, a quedarnos en el pasado, estoy viendo hacia delante”, insistió.
Claudia Guerrero
Agencia Reforma
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