El Gobierno de México llamó a consultas a su Embajadora en Venezuela, Eréndira Paz Campos, y redujo la cooperación con ese país sudamericano, luego de desconocer el resultado de su elección presidencial.

La diplomática mexicana debe regresar al País para analizar la crisis política, social y económica en Venezuela y recibir nuevas instrucciones por parte de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).

Además, en congruencia con la declaración del Grupo de Lima emitida ayer lunes y la cual enlista una serie de acciones de los países miembros para expresar su rechazo a los comicios venezolanos, la Administración del Presidente Enrique Peña Nieto convocó a la Embajadora de Venezuela en México, María Lourdes Urbaneja Durant, para expresar la postura del País ante la reelección de Nicolás Maduro.

El Gobierno mexicano dio a conocer en un comunicado que no reconoce la legitimidad del proceso electoral desarrollado en Venezuela por no cumplir con los estándares internacionales de un proceso democrático.

“La Secretaría de Relaciones Exteriores informa que no reconoce la legitimidad del proceso electoral desarrollado en la República Bolivariana de Venezuela que concluyó el pasado 20 de mayo, por no cumplir con los estándares internacionales de un proceso democrático, libre, justo y transparente”, afirmó la Cancillería en el documento.

El pasado domingo 20 de mayo, se realizaron en ese país comicios presidenciales, de los cuales resultó ganador el actual Mandatario de Venezuela, Nicolás Maduro, por seis años más.

Conforme los acuerdos tomados por los países miembros del Grupo de Lima, México también emitió una alerta a los sectores financiero y bancario mexicanos sobre el riesgo en el que podrían incurrir si realizan operaciones con el Gobierno de Venezuela que no cuenten con el aval de la Asamblea Nacional.

Lo anterior incluye una alerta por los convenios de pagos y créditos recíprocos por operaciones de comercio exterior, según se informó.

Asimismo, resolvió reducir al mínimo las actividades culturales y de cooperación bilateral, incluida la militar con el país sudamericano, y suspender, hasta nuevo aviso, las visitas de alto nivel a Venezuela.

“México se mantendrá atento a la evolución de los acontecimientos en Venezuela y seguirá buscando, tanto a nivel bilateral como multilateral, contribuir a la restauración de la institucionalidad democrática, el respeto de los derechos humanos y la plena vigencia del estado de derecho en ese país”, expuso la Cancillería.

Isabella González
Agencia Reforma