Familiares y amigos son los principales victimarios de las personas explotadas sexualmente; en casos de abuso laboral, por lo general, son sujetos ajenos a la víctima quienes los enganchan, aseguró Yolanda Samperio Delgadillo, titular de la Fiscalía de Trata de la Procuraduría General de Justicia de Hidalgo (PGJH).

En lo que va del año, se han iniciado dos carpetas por probable explotación laboral, las cuales se encuentran en integración; 2018 cerró con 13 casos: uno por dicho delito y el resto por prostitución forzada, informó la funcionaria en entrevista con Criterio.

Agregó que, generalmente, se ha detectado que las víctimas provienen de familias disfuncionales, viven pobreza, marginación y violencia, lo que las hace altamente vulnerables; además, el explotador, de manera común, es pariente o amigo de los agredidos.

Samperio Delgadillo expresó que, a lo largo del año, la fiscalía a su cargo realiza acciones de prevención del delito, como pláticas con adolescentes, uno de los sectores más susceptibles de caer en engaños.

Aseveró que, en la entidad, no es alta la incidencia del ilícito; sin embargo, se requiere una coordinación de varias instituciones, empresarios, sindicatos, organizaciones de la sociedad civil (OSC) y ciudadanos para combatirlo, dijo.

Según datos de la PGJH, desde 2015 hasta abril de este año, en Pachuca, Tula, Zacualtipán, Mixquiahuala, Huejutla de Reyes, Ixmiquilpan, Tizayuca y Actopan se han iniciado carpetas por trata de personas.

De acuerdo con la asociación civil Coalición contra la Trata de Personas en América y el Caribe, a nivel internacional se considera que la mayoría de las mujeres son enganchadas para la comisión del delito por personas cercanas, como familiares y conocidos.

INCIDENCIA

13 expedientes por trata de personas, ya sea sexual o laboral, registrados durante 2018, según la fiscalía del delito

Marisol Flores | Pachuca