Al menos 30 sujetos atemorizan a los pobladores del fraccionamiento Las Campanas, en Tizayuca, acusaron habitantes de ese sector, pues refirieron que los jóvenes consumen droga y alcohol, para después cometer desmanes y alteraciones al orden público.
Los quejosos, que solicitaron el anonimato por temor a represalias, aseguraron que han pedido la intervención de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) municipal; sin embargo, los policías han sido rebasados por los vándalos y se han retirado sin lograr detenciones.
“Son chicos de 17 a 27 años; todos los fines de semana se reúnen, beben, consumen droga e incluso se pelean entre ellos; sin embargo, cuando acude la Policía se ponen de acuerdo para correrlos, porque siempre son pocos elementos”, señaló una afectada.
Aseguró que los sujetos protegen a un individuo identificado como Jorge, quien supuestamente se dedica a la venta de enervantes; incluso, señaló: “Invadieron una vivienda en la calle Plata para sembrar marihuana en el patio trasero”.
Los colonos han dejado de frecuentar los espacios públicos, como cancha de futbol, parque y juegos recreativos, por ser el sitio donde los supuestos malhechores se reúnen.
Las Campanas está en el abandono de las autoridades y hasta el anterior Consejo de Colaboración dejó acuerdos inconclusos con la alcaldía, agregó otra vecina.
La problemática se acrecienta debido a que los individuos son protegidos por sus familias, advirtió.
Al respecto, el comisario de la SSP municipal, Miguel Ángel Sánchez Lugo, manifestó que la ingesta de alcohol y enervantes en la zona es una problemática y que, en varias ocasiones, han intervenido para solucionar conatos de pelea, pero no ha habido ningún detenido.
“Son chicos que se meten a sus hogares y nosotros tenemos prohibido entrar”, dijo.
Alfonso Marín
Tizayuca