Habitantes de las colonias San Nicolás El Chico y San Antonio Farías indicaron que la señalización de topes y balizamiento de líneas de prevención que realiza el gobierno de Tulancingo en el bulevar Quetzalcóatl –donde también se prevé la colocación de boyas en los retornos cercanos a la unidad deportiva Javier Rojo Gómez– contradice lo que el viernes pasado acordó el comité vecinal con personal de la Secretaría de Obras Públicas y Ordenamiento Territorial (Sopot) de Hidalgo.
Los quejosos entregaron a Criterio una copia de la minuta hecha durante el recorrido de supervisión en la vía encabezado por Fernando Abogado Montes de Oca, presidente de Conservación de Carreteras de la Sopot, en la que convinieron la instalación de señalamiento vertical (placas) en topes y cruces peatonales, para establecer el límite de velocidad permitido.
La secretaría se comprometió a pintar los bordes y rayas logarítmicas en cruces para transeúntes y frente a la primaria del lugar.
Asimismo, a retirar las boyas en los retornos y a colocar o modificar los topes de cinco espacios para dar vuelta.
También, la dependencia analizará la petición vecinal sobre la instalación de un borde en el llamado Puente Colorado, al igual que la adecuación de dos retornos para asegurar el paso de transporte pesado, incluso, prevé demoler una parte del camellón central.
Por su parte, Miguel Ángel Pérez, habitante de la zona señaló que aun cuando la administración aseguró que atiende las demandas vecinales en coordinación con la Sopot, personal de esa dependencia afirmó que nadie del municipio los ha contactado.
María Antonieta Islas
Tulancingo