Tras participar en la presentación del libro Tula y su jurisdicción: arqueología e historia, el cual compila el origen, desarrollo, esplendor, costumbres y sociedad de Tollan Xicocotitlán, el delegado del INAH en Hidalgo, Héctor Álvarez Santiago, afirmó que, para evitar el deterioro de los dos atlantes originales situados en la pirámide B de la zona arqueológica del municipio, la dependencia que encabeza ha planteado resguardar las figuras y reemplazarlas
con copias.
El empleado del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) dijo, en entrevista con medios de comunicación, que la lluvia ácida que se precipita “en ocasiones” en Tula tiene componentes que degradan el material pétreo, ya que, al caer sobre las estatuas, estas sufren un “severo” daño.
El funcionario detalló que las sustancias químicos de las precipitaciones afectan los pigmentos prehispánicos; “por ello, una de las propuestas es reemplazar los dos atlantes originales por replicas, con objetivos de conservación”.
De acuerdo con Álvarez Santiago, el viento, “aunque no lo parece”, desgasta los relieves.
Miguel Ángel Martínez
Tula de Allende