La asociación civil Amorevolezza promueve la campaña de sensibilización ecológica #ColillasChallenge, que fomenta la recuperación de filtros de cigarro para reciclarlos y transformarlos en ecoproductos.
De acuerdo con Fernanda Pasquel Solís, presidenta de la agrupación, las colillas requieren un tratamiento especial porque son altamente contaminantes.
Explicó que este tipo de sobrantes tarda de 10 a 20 años en degradarse y uno solo puede contaminar hasta 50 litros de agua potable y ocho litros de salada.
La activista advirtió que, en México, al año, se generan alrededor de 50 mil toneladas de este desecho, por lo que el problema es “mayúsculo”.
Por ello, invitó a la población a depositar los restos de cigarros en botellas de plástico con tapa y llevarlas a los centros de acopio que operan en el Club de Leones y las oficinas de Amorevolezza, ubicadas en Calzada Hidalgo, número 591, colonia Zapotlán de Allende, frente al puente peatonal de la hacienda Exquitlán.
Agregó que después de un proceso biotecnológico, los residuos se transforman en papel, cartón, macetas o aislante.
María Antonieta Islas
Tulancingo