Ayer, agremiados de la Sección 186 del Sindicato Único de Trabajadores Electricistas de la República Mexicana (Suterm), de la planta de Ciclo Combinado de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), efectuaron un paro en defensa de sus derechos laborales.

Entre los reclamos, están el respeto de uno a tres días de permisos o incapacidades y el pago de sustitutos para cubrir dichas jornadas, además del cese a los privilegios del personal de confianza, que al sindicato le quitaron por supuestas medidas de austeridad.

Un trabajador, que prefirió no identificarse por temor a represalias, acusó que al sindicato le suprimieron casi todas sus prestaciones, mientras que a los de confianza les mantienen los bonos de productividad, pago de telefonía celular, incentivos por puntualidad, entre otros privilegios, dijo.

Por ello, alrededor de 90 trabajadores efectuaron el paro, en busca de entrevistarse con el gerente Ricardo Gándara Gándara y con el secretario general Antonio Arcos Ruiz, a quienes expondrían que los recortes “no son parejos”.

Los quejosos aclararon que la operatividad de la planta ni el suministro eléctrico de la Ciudad de México y de los municipios de la región Tula no estuvieron en riesgo, ya que en la manifestación solo intervinieron administrativos y personal de mantenimiento.

“Los operativos no están aquí, mantienen la misma inconformidad, pero para no interrumpir labores están atendiendo sus puestos de trabajo normalmente”, señaló un manifestante.

Los sindicalizados impidieron la entrada a la planta a los de confianza, pero a las 11:00 horas les permitieron el acceso para sostener una reunión a puerta cerrada.

Miguel Ángel Martínez

Tula de Allende