Familiares y amigos de las dos personas asesinadas el martes pasado en la privada Alfonso Corona del Rosal, perteneciente al barrio San Miguel, exigen justicia.
Los quejosos descartaron la versión de que los occisos estaban relacionados con la venta de droga e implicados en los hechos violentos que azotan a Ixmiquilpan, al referir que uno de ellos daba pláticas motivacionales y profesaba la religión evangelista.
“Por las redes sociales nos enteramos que habían matado a dos personas, pues se especulaba que vendían droga como los demás que han ejecutado, más nunca nos imaginamos que se trata del evangelista Omar, pues el solo hacía lo que le gustaba: acercar a los jóvenes a Dios”, comentó un amigo.
Mencionó que era un individuo muy tranquilo, que no tenía problemas con nadie ni mucho menos alguna deuda o vicio.
“Consideramos que estuvo en el lugar y hora equivocada pues solo había ido a visitar a la otra persona que estaba ahí y que también falleció, Omar acudiría a predicarle el evangelio”, añadió otro conocido.
“Pedimos a las autoridades que de verdad se investigue”, reclamó un familiar.
En la edición de ayer, Criterio informó que en tres meses y medio suman 23 personas ejecutadas en Ixmiquilpan, según reportes de la Agencia de Seguridad Estatal.
Perla Vázquez I Ixmiquilpan
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