Alrededor de las 10:00 horas, Santiago tomó la ruta que le marcó el Waze para llegar a su trabajo en Polanco, la cual lo llevó a cruzar el tramo de la calle General Juan Villegas, entre Sóstenes Rocha y Rincón Gallardo, en la colonia Ampliación Daniel Garza, alcaldía de Miguel Hidalgo, en la Ciudad de México.
“Veo que hay una fila de coches y a mi lado un grupo como de seis adolescentes, de entre 14 y 18 años; me empezaron a señalar con la mano y decían: ‘mira, al güerito, dale, dale; después, se metieron las manos a las bolsas y se acercó un chavo agresivo que me gritaba que bajara la ventana con las manos en la bolsa, dije: ‘uy, no. Me voy a pelar”.
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El joven, de 23 años, platicó que cayó en pánico, vio que el carril en contrasentido estaba libre, se agachó, aceleró y chocó con dos autos.
“Gracias a Dios no le pasó nada a nadie”, dijo.
“Salieron corriendo en sentido contrario, pero lo que me llamó mucho la atención es que luego luego todas las personas y señoras que trabajan por aquí estuvieron muy al pendiente, me ayudaron muchísimo, como si fueran ángeles de la guarda, me trajeron agua, me daban la mano y al final fueron ellas las que le dieron el testimonio a los oficiales, pues ubican y conocen a los asaltantes”, relató.
Jesús Omar Marroquín Hernández
Agencia Reforma
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