El omelette es un desayuno ideal, pues es una excelente fuente de proteína y, según los complementos que se elijan, puede convertirse en un platillo completo para cualquier hora del día.
Queso panela a la plancha o cualquier otro queso, tomate asado, papas, verduras como nopales, calabacitas, champiñones, pimientos, así como carnes frías son ingredientes perfectos para rellenarlos, pero las opciones son infinitas.
Regularmente el omelette se prepara tierno, pero en el norte se acostumbra consumirlo cocido con vegetales y tortillas o pan como complemento, y para beber, un jugo de fruta natural, explica Guillermo Quezada Escamilla, chef del restaurante La Méjico.
Un omelette es un clásico en el desayuno y aporta la energía suficiente para realizar las actividades del día, incluso si la rutina diaria incluye ejercicio.
El típico es a la mexicana o con queso y champiñones, pero para los rellenos no hay limitaciones: pueden ser vegetarianos, con carne, con pollo e incluso rellenos combinados, que enriquecerán su sabor.
Omelette florentino
1 porción / sencillo / 6 min
INGREDIENTES
2 piezas de huevo
10 gramos de mantequilla
15 gramos de queso asadero
Para la salsa de queso:
1 diente de ajo
10 gramos de tocino picado
3 hojas de espinaca
10 gramos de queso asadero
Crema
Sal al gusto
*Guarnición
1 rebanada de pan tostado
Rebanadas de aguacate
Rodajas de tomate
Preparación:
Batir dos piezas de huevo en un tazón y agregar sal al gusto. Aparte, dorar el ajo y tocino por 5 minutos, añadir la espinaca, crema y queso. Dejar espesar. Agregar mantequilla al sartén, los huevos batidos, el queso y hacer dos pliegues, uno de cada lado.
Keren Gómez I Agencia Reforma