El Huawei P30 Lite, el Xiaomi Pocophone F1, el Motorola Moto G7 Plus, el Nokia 7.1, el Samsung Galaxy A50. Todas esas son opciones que encontrarás en las tiendas si 8 mil pesos es tu presupuesto para comprar tu próximo celular. Pero ahora, Google tiene un teléfono en ese rango de precios que podría convencerte de elegirlo por sobre todos los anteriores.

Se llama Google Pixel 3a y, en términos estrictos, es el hermano menor del Pixel 3, el cual se presentó en octubre pasado a 800 dólares. Tenía una gran cámara, un diseño con notch que no convenció a muchos y Android puro provisto por la empresa.

Los Pixel 3a y 3a XL, lanzados este mes, conservan la esencia de su diseño, pero con una pantalla sin notch. Mantienen su cámara, de 12.2 megapíxeles y con especial atención en la fotografía nocturna. Lo que no preservan es su precio: el Pixel 3a cuesta 400 dólares; y el Pixel 3a XL, 480.

Usar el 3a se siente bastante como usar un iPhone 5s, el equipo que Apple lanzó en 2013 como una alternativa más barata de su iPhone regular. El Pixel 3a es de policarbonato, en un mundo de equipos de metal y cristal. Su pantalla de 5.6 pulgadas se ve bien, pero tiene lo que podrían considerarse bordes gruesos en sus cuadros extremos, en un ambiente donde Samsung, Apple y Huawei han reducido los biseles al mínimo.

Por esas impresiones, el Pixel 3a podría sentirse barato y que no vale los 7 mil 300 pesos que podría costar al cambio en México, pero es en su uso diario donde cambia la percepción.

Ver un video en YouTube hace gala de su pantalla con buen contraste y reproducción de color. Poner una canción en Spotify en sus altavoces es una experiencia que sorprende con un sonido estéreo fuerte y claro. Sacar su cámara a pasear y descubrir sus fotografías de primer nivel, incluso en zonas oscuras y de noche es el bonus final que hace que el Pixel 3a valga la pena.

El 3a tiene un solo lente, el mismo que el del Pixel 3, que no tiene zoom óptico, pero sí toma imágenes de muy alta calidad, tanto de día como de noche. Su modo Visión Nocturna, en particular, es impresionante, y no encontré mucha diferencia entre sus fotos y las que toma el Galaxy S10+, el cual cuesta casi 20 mil pesos más.

El procesador Snapdragon 670 se presentó en agosto pasado y es el más poderoso de los que se verán en los teléfonos de gama media este año. En mis pruebas funcionó bien y más vale que permanezca así, porque Google prometió que actualizará el Pixel 3a al menos tres años, algo que ocurre con muy pocas marcas de Android y casi nunca para los smartphones en este rango de precios.

Para quien haya usado un iPhone, un Galaxy o un P de Huawei de sus modelos más caros, usar el Pixel 3a sí se sentirá como bajar de categoría. Acá no hay carga inalámbrica y el almacenamiento interno me quedó cortito para descargar todas mis playlists de Spotify. No hay ajustes de Dolby Atmos para incrementar la calidad del audio y tampoco hay protección IP que lo haga resistente al agua.

La mayoría de esas funciones son lujos y vaya que las marcas los cobran cada vez más caros. Pero para los compradores concienzudos que no quieran gastar más de 8 mil pesos en un smartphone, pero que busquen que cada peso valga la pena, el Pixel 3a promete ser la diferencia. Si tan solo tuviera la opción de expandir el almacenamiento, entonces sería el equipo perfecto en su precio.

A DETALLE

Google Pixel 3a

Pantalla: 5.6 pulgadas OLED 1080 x 2200 pixeles

Cámara trasera: 12.2 MP f/1.8

Cámara frontal: 8 MP f/2.0

Batería: 3,000 mAh y carga rápida 18 W

Procesador: Qualcomm Snapdragon 670

Almacenamiento: 64 GB no expandibles

RAM: 4 GB

Precio: 400 Dls.

José Luis Adriano I Reforma

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