Señoras y señores, la realidad es que México no pudo con Estados Unidos.
El equipo de Bruce Arena vino a plantear un partido ideal para ellos: marcar rápido, producto de una jugada desafortunada de México, pero con un gran tiro que se convirtió en un gran gol de Michael Bradley.
Después Carlos Vela, el más brillante de la Selección, si se puede decir brillante dentro de lo mal que jugó el equipo, marcó el gol del empate en una jugada que fabricó tras un despeje de Guillermo Ochoa.
México después intentó dominar, presionó pero no pudo porque efectivamente había un muro enfrente, tanto que Juan Carlos Osorio intentó reaccionar, pero sus cambios fueron terribles.
Jesús Gallardo más o menos atacó por la izquierda, pero Javier Aquino y Orbelín Pineda no aparecieron, como tampoco lo hizo el “Chucky” Lozano, “Chicharito” Hernández ni Marco Fabián, quien fue una crisis total.
Más o menos los demás se comportaron, hubo un tiro al travesaño por parte de Héctor Herrera, pero hubo un tiro al poste por parte de Bradley, tuvo más oportunidades México pero no concretaba, llegaba pero sin profundizar, paseaba la pelota de un lado a otro y daba la impresión de que México llegó a un momento donde dijo “bueno vamos a terminar con el empate a uno, un punto más antes de la Confederaciones y ahí nos quedamos”.
Es indudable que a México le costó mucho desbordar y buscó el centro por aire que los norteamericanos ganaron siempre.  No tuvo la fuerza ni la potencia para esquivar hombre por hombre que es algo que tiene el “Tecatito” Corona. Sólo él y sus allegados saben porqué declinó ir a la Confederaciones; sólo se dijo que fue por problemas personales.
El silbatazo final llegó a tiempo porque el partido no daba para más. No hay que festejar, México no ha clasificado, pero lo hará más adelante; van a clasificar también Estados Unidos y seguramente Costa Rica, mientras que Panamá irá al Repechaje.
Pero después de no poder vencer a Estados Unidos, ¿qué le espera en la Confederaciones?
Le espera el campeón de Europa, Portugal, y tiene en sus filas al mejor delantero de la Eliminatoria de la UEFA, Cristiano Ronaldo, máximo goleador de la Champions, campeón de Champions y España, un jugador que en cualquier momento desequilibra un partido.
Portugal tiene la base que ganó la Euro; no fue brillante pero sí muy práctico, ganó los partidos que tenía que ganar con apuros, y venció a Francia en su casa.
Y si logras avanzar de ronda te vas a encontrar o a Alemania, que lleva a un equipo joven y muy bueno, o a Chile con todos sus titulares. Ahí México tiene que mostrar mejor calidad, más futbol, menos rotaciones y distinguirse por lo menos por competir, no es lo mismo perder por perder, que perder compitiendo por 3-2 o 4-3 en un partido de gran calidad.
No va ser a una Confederaciones de alto nivel, los equipos, ya lo demostró Alemania, van a llevar jugadores que se están preparando para el cambio generacional.
Quizá el equipo más serio sea Portugal porque repite los mismos jugadores que la Copa Europea, pero ni Rusia ni Alemania repiten hombres, van a ser equipos complicados sin demeritar a Camerún ni a Nueva Zelanda.
México pues, tendrá que rendir el doble o el triple de lo que rinde en Concacaf, no es un torneo fácil aunque sea de preparación.