Un despliegue de tropas militares fue llevado a cabo como respuesta por el presidente de Corea del Sur Moon Jae-in, después de que Corea del Norte arrojara un misil que sobrevoló Japón en las primeras horas del martes, hecho que el gobierno de Seúl consideró como una clara provocación.
La Fuerza Aérea surcoreana envió cuatro aviones de combate F-15K para realizar un bombardeo con munición real, al lanzar ocho bombas MK-84 de una tonelada cada una, contra un blanco simulado en el campo de tiro Pilseung, en la provincia de Gangwon.
Las tácticas ejecutadas “con exactitud”, estuvieron destinadas a perfeccionar la capacidad de destrucción completa de “liderazgo enemigo” en caso de una emergencia.
Por su parte, Kang Kyung-wha ministra de Asuntos Exteriores de Corea del Sur dialogó con el secretario de Estado estadunidense Rex Tillerson sobre las medidas de respuesta al disparo de misiles balísticos de Corea del Norte
El Estado Mayor Conjunto surcoreano (JCS) surcoreano, informó que Corea del Norte arrojó este martes (hora local) un misil balístico que sobrevoló Japón y cayó en el océano, frente a las costas orientales de la isla de Hokkaido.