Los embarazos en niñas en Hidalgo son una situación preocupante, pues podrían tratarse de abusos sexuales, consideró Bertha Miranda Rodríguez, presidenta de la Red por los Derechos Sexuales y Reproductivos (Ddeser).

Ayer, Criterio publicó que, de acuerdo con la Secretaría de Salud del estado (SSH), durante 2017 hubo 207 alumbramientos en niñas de entre 10 y 14 años.

La activista señaló que en 2017 Ddeser acompañó 12 casos de abuso contra menores, de los cuales dos se registraron en la Huasteca, seis en Tulancingo, tres en Tula y uno en Tizayuca.

La Estrategia Nacional de Prevención del Embarazo en Adolescentes (Enapea), implementada por el gobierno federal, señala que este tipo de gestaciones se debe investigar con perspectiva de violencia sexual.

“Los procuradores de justicia deben investigar todos los casos de mujeres embarazadas menores de 15 años como posible violación”, coincidió Miranda Rodríguez.

La activista consideró necesario revisar cómo se atiende a niñas víctimas de violencia, pues existe revictimización durante las investigaciones, cuando el médico legista, agentes del Ministerio Público y psicólogos hacen que la menor reviva en cada servicio lo que le sucedió, por lo que sugirió que se deben cambiar los protocolos.

Sara Elizondo I Pachuca