Acercarse al turismo ecológico, de naturaleza y aventura, así como alejarse lo más posible del overtourism o turismo de masas son algunas de las intenciones que tienen quienes desean darse un baño de sol y mar en Semana Santa, la Semana de Pascua o en la próxima oportunidad que tengan para regalarse una escapada.
En estos tiempos existe una alta tendencia de evadir los enormes all inclusive colmados de spring breakers y mejor invertir un poco más de tiempo y dinero en complejos exclusivos que ofrecen suites o villas con buena gastronomía, tratamientos de bienestar, prácticas de sostenibilidad e incluso piscinas privadas en destinos tan deseados como la Riviera Maya, la Riviera Nayarit o Los Cabos.
En este último, por poner un ejemplo, Montage Los Cabos ocupó el primer lugar en la categoría de Mejores Hoteles y Resorts en México en el ranking anual de los Mejo-res Hoteles de 2022, elaborado por U.S. News & World Report. Esta paradisíaca propiedad es miembro de Preferred Hotels & Resorts, el grupo de hoteles independientes de lujo más grande del mundo.
Otro ejemplo, esta vez en la Riviera Maya, es el Banyan Tree Mayakoba que concede a los huéspedes la maravilla de sumergirse en jornadas íntimas de relajación.
Tan seductora como la anterior está la idea de tener una romántica fuga a Playa Viva, un destino Eco Luxury especialista en el llamado turismo regenerativo en el que los huéspedes, además de dormir en una acogedora casa de árbol, pueden unirse a programas que apoyan a las comunidades de la zona. Este resort ecológico está cerca del pueblo de Juluchuca, a 35 minutos del aeropuerto Ixtapa/Zihuatanejo, en Guerrero.
Asimismo, los viajeros que buscan algo más que disfrutar de los hoteles destino y realizar alguna que otra actividad que les permita empaparse de naturaleza tienen un sinfín de opciones en todo el país.
En este caso, por su tranquilidad y belleza, las playas cercanas a La Paz se encuentran entre las favoritas de México. En dicha zona está Playa Balandra, todo un edén de Baja California Sur para quienes desean capturar la belleza que se asoma entre el mar y el desierto.
Los más aventureros quizá deseen practicar sandboarding en las dunas de El Sabanal, frente a la Playa Chachalacas, aproximadamente a una hora del puerto jarocho, en el municipio Úrsulo Galván, en Veracruz. No obstante, si lo anterior tiene demasiadas dosis de adrenalina y lo que se busca es practicar el slow travel, conviene ir a Mazunte, Pueblo Mágico de la costa oaxaqueña; nadie debe perderse de los conmovedores atardeceres que se observan desde Punta Cometa.
Otra tierra con una vasta explosión de color es Yucatán, razón por la cual a muchos se les antoja conocer Las Coloradas, paraíso con una inusual belleza, ubicado en un estero, en el litoral norte de la Península de Yucatán. Las Coloradas están dentro de una zona privada, propiedad de la Salinera, de Yucatán, y aunque sus aguas no son aptas para nadar, el acceso está permitido.
Por último, Quintana Roo presume destinos de la llamada Grand Costa Maya, entre los que destacan Bacalar, Chetumal y Mahahual, todos idóneos para practicar ecoturismo. Por si fuera poco, la isla de Holbox se ha convertido en favorita tanto de trotamundos que viajan en solitario como de románticos empedernidos.
Patricia Miranda I Agencia Reforma
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