Las referencias a Cruz Azul como un equipo arrimado por parte de la afición americanista generaron molestia en el presidente del club, Guillermo Álvarez.

“También es nuestra casa, no se es arrimado ni mantenido porque pagamos renta y generamos ingresos.

“Fuimos invitados y aceptamos gustosos de regresar a la que fue nuestra casa durante 25 años y por eso lo hicimos con mucha simpatía y muy buena vibra con el señor Azcárraga y el futbol de la Ciudad de México”, dijo el directivo.

Álvarez, presente en el Gran Premio de México de Fórmula 1, dio también su opinión sobre el clásico joven, disputado el pasado sábado entre la Máquina Celeste y las Águilas del América, duelo en que su equipo le dejó una grata impresión.

“Fue mejor, pero muy superior no. Creo que el aficionado que se congregó se fue muy satisfecho porque a veces esos partidos de 0-0 no hay tanto ida y vuelta.

“Muy intenso, desde luego que los goles siempre pueden ser el aderezo para un buen platillo, pero la afición se emocionó y ayudó mucho que no hubiera lluvia en pleno juego, fue parejo”, aseguró.

Antonio Sánchez I Agencia Reforma