La tensión en el Bajío subió a su máximo nivel.
Ayer, los jugadores optaron por no atender la convocatoria a medios que el mismo club realizó. El presidente deportivo Rodrigo Fernández tuvo que salir a dar la cara.
“Se entiende que se sienten mal. Los jugadores no están contentos por no estar en la liguilla. Se sienten mal y a veces no quisieran hablar, pero también hay que dar la cara, asumir responsabilidades”, aseguró
Por otro lado, habló sobre las renovaciones de Alexander Mejía y Mauro Boselli.
El mediocampista dijo a medios de su país natal, Colombia, que quiere salir del cuadro guanajuatense, mientras que el delantero termina contrato al fin del Apertura 2018.
“Si hay la oportunidad para ellos y creen que es lo mejor, adelante. Somos un club que dejamos que el jugador decida y defina su situación. Se está viendo, se está analizando, no de hoy, de tiempo atrás, y todavía no se han puesto de acuerdo”, puntualizó.
Cabe recordar que algunos rumores han indicado que Boselli podría volvería al futbol argentino. En caso de concretarse su regreso al país sudamericano, Mauro dejaría al León como el segundo máximo anotador en la historia del club.
El directivo adelantó que será hasta que termine el torneo cuando analicen la continuidad de Ignacio Ambriz.
Redacción I Pachuca