La candidata a diputada por el Distrito VII se definió como un perfil meramente ciudadano
Para Mirna Rubio Sánchez, candidata por Movimiento Regeneración Nacional (Morena) a diputada federal por el distrito VII, con cabecera en Tepeapulco, la educación es uno de los ejes principales de su campaña, pues con ello se puede garantizar seguridad, desarrollo económico y, sobre todo —dijo— la Cuarta Transformación.
En entrevista con Criterio, Mirna, quien se definió como un perfil meramente ciudadano, resaltó su preparación en el sector educativo, del cual aseguró echará mano en caso de que el electorado del distrito por el que compite la elija como su representante en el Congreso de la Unión.
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Madre de dos hijas, esposa, hija y hermana, Rubio Sánchez cuenta con una amplia trayectoria en el magisterio, pues se ha desempeñado en diversos cargos en la Sección XV del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) durante los últimos 26 años.
Entre los puestos en los que ha trabajado están la Dirección de Actas y Acuerdos, la presidencia de la Caja de Ahorro y Crédito, así como la Secretaría General de Trabajo y Conflictos de la organización sindical de los maestros.
No obstante, gracias a su vocación por ayudar a la ciudadanía, tomó el reto de buscar la candidatura por el distrito VII, que comprende municipios como Tepeapulco, Almoloya, Apan, Emiliano Zapata, Tepeapulco, Tizayuca, Tlanalapa, Tolcayuca, Villa de Tezontepec, Zapotlán y Zempoala.
En caso de obtener la victoria en las urnas por el distrito que abarca el Altiplano, Rubio Sánchez aseguró que su trabajo “será de territorio y no de escritorio”, por lo que se comprometió a que las peticiones de la ciudadanía que representa serán sus herramientas de trabajo para gestionarlas a nivel federal.