Entre las afectaciones no atendidas de las obras del Plan Hídrico de Tula, a cargo de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), hace falta la terminación de la losa de pavimento hidráulico del callejón La Cruz o por lo menos colocar un barandal de protección para transeúntes y vehículos que crucen por la zona; de lo contrario, podría ocurrir un accidente, alertaron vecinos.

Personas consultadas por este medio dijeron que, aunque se reabrió el tránsito vehicular en la citada vía —que conecta a la colonia Pemex con Villas del Salitre— en realidad solo ocurrió en una parte, pues el resto no está reparado, sino que permanece colapsado, “dado que el río se la comió”.

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El 31 de diciembre de 2023, en el área se suscitó el derrumbe de una pared del afluente, justo en el mencionado tramo, que derivó en la muerte de un trabajador de la empresa Control de Erosión y que, además, dejó inutilizable la arteria, que permaneció cerrada por casi cuatro meses.

Fue hasta mediados de abril cuando, sin previo aviso, la Conagua y el ayuntamiento de Tula determinaron reabrirla, pero sin haber repuesto toda la plancha de concreto que conformaba la vía, sino apenas uno de dos carriles.

Sin señalamientos

Actualmente, el área carece de señalamientos de riesgo o peligro y sin un barandal que proteja de caer a los peatones o vehículos que se acerquen mucho a la orilla, pero vecinos dijeron que existe el temor de que el muro de contención del río Tula se deslave de nuevo.

Indicaron que hay probabilidades de que percances como los antes expuestos podrían ocurrir durante la noche, debido a la falta de alumbrado público en esta zona, por lo que insistieron en que, por lo menos, debe colocarse una barrera o una muralla de concreto con los que las personas puedan estar a salvo y evitar pérdidas humanas o lesiones.