El ayuntamiento de Singuilucan gastará 47 millones 86 mil 905 pesos en un drenaje sanitario que se construye desde febrero en una zona con apenas cinco viviendas. Pobladores cuestionaron el impacto social, pues es “una obra en el desierto”, dijeron.
El proyecto empieza en la comunidad La Gloria y atraviesa una región de la cabecera municipal en la parte baja. Las viviendas se encuentran a cien metros de distancia de la red, constató Criterio en un recorrido.
Según los lugareños, para conectarse al sistema de drenaje requieren excavar a 2 metros de profundidad, lo que representaría un alto gasto. Hay una vivienda 25 metros a desnivel del dren.
“Aquí es un lugar de mucha piedra y tendrían que tumbar árboles, en algunos casos magueyes, o atravesar parcelas. Esta es una zona rural, no urbana”, argumentó un habitante de la zona.
La población vaticinó que el uso de la red será nulo. Aseguraron que la obra fue mal planeada y evaluada; además, dijeron, es más importante contar con la pavimentación del camino y construir fosas sépticas para las casas.
“La tubería estaba abierta y con los primeros aguaceros se tapó con piedra y tierra. Ahorita el camino está en pésimas condiciones”, expresó uno de los inconformes.
Según una placa en el sitio, los recursos del proyecto provienen del Fondo Regional 2017 y se beneficiará a un total de 4 mil 76 personas.
Nathali González I Singuilucan