La diputada del Partido Acción Nacional (PAN) Claudia Lilia Luna Islas presentó una iniciativa de reforma en el Congreso de Hidalgo, para que se catalogue como discriminación no respetar la libre determinación de las personas a tener tatuajes y perforaciones corporales.
Para ello, propuso reformar el artículo 11 de la Ley para Prevenir, Atender, Sancionar y Eliminar la Discriminación en el Estado de Hidalgo, al agregar como acto de segregación que se ofenda a alguien por tenerlos.
“Es importante realizar acciones en pro de la igualdad y garantía de los derechos de los ciudadanos tatuados o con perforaciones, para que puedan gozar del libre acceso a oportunidades de trabajo, a espacios de participación comunitaria, y puedan generar proyectos de vida, propuestas ciudadanas y comunitarias desde su perspectiva y conocimiento”, aseveró la legisladora.
La panista afirmó que uno de los escenarios en los que hay más discriminación en contra de estas personas es el ámbito laboral.
“Las personas deben ser contratadas de acuerdo con su capacidad, eficiencia, desempeño y compromiso laboral, pero no se les puede negar realizar un trabajo solo por tener tatuajes o perforaciones corporales”, dijo.
De acuerdo con datos de la Secretaría de Salud –dijo-, alrededor de 30 mil personas se realizan tatuajes, a nivel nacional, por lo que se estima que en México una de cada 10 personas tiene al menos uno.
En la sesión, además, se aprobaron seis acuerdos económicos, entre ellos el dirigido a la Secretaría del Trabajo y Previsión Social del Estado de Hidalgo (STPSH), a la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Hidalgo (CDHEH) y al Poder Ejecutivo de la entidad para promover el derecho de las personas recluidas en prisiones al trabajo digno y a recibir capacitación.
También dirigieron acuerdos a los ayuntamientos que cuentan con población indígena reconocida, para que consideren la creación de la Secretaría de Desarrollo de Pueblos y Comunidades Indígenas.
MITOS PROMUEVEN SEGREGACIÓN, DIJO
La legisladora explicó que todavía hay mitos alrededor de las personas con tatuajes y perforaciones, como que son criminales o no pueden donar sangre. Además, dijo, son rechazados por parte de la sociedad al ser asociados con enfermedades de transmisión sexual
Según la Secretaría de Salud, una de cada 10 personas en México tiene un tatuaje
Emmanuel Rincón I Pachuca
También te puede interesar:
