En las calles aledañas al Zócalo capitalino, comerciantes ambulantes ofrecen tazas, gorras, llaveros, peluches, estampillas, playeras y bolsas con la imagen de AMLO o de Morena.
Desde la campaña presidencial es común encontrar en cada evento del tabasqueño estos productos. Sin embargo, asegura la comerciante Araceli González, la venta este día, en que Obrador asumió como Presidente de México, ha sido la mejor.
“Hoy está bueno”, celebra, levantando los pulgares en señal de alegría.
La vendedora comparte que siguió a López Obrador en cada mitin que organizó desde la campaña, y nunca como en este día había vendido tanto.
“La gente está contenta, viene a celebrar que ganamos”, apunta. “También es la libertad que nos dieron aquí de vender sin problemas”.
La gente se acerca a comprar tazas en 40 pesos y “pejeluches” que van de los 80 a 150 pesos, así como llaveros de a 20 y estampillas de a 10.
Las personas compran un “recuerdito” y lanzan consignas: “la juventud es de Andrés Manuel López Obrador”, subraya una señora.
“No sólo es Presidente de México, también es de Latinoamérica”, lanza, por otra parte, un hombre, convencido de su afirmación.
La marca AMLO vende y vende bien.
¿Por qué comprar un souvenir hoy?, se les cuestiona.
“Porque hoy es Presidente por fin, después de tres intentos. ¿Cómo no querer recordar?”, dice Graciela, de 55 años, quien compró un peluche de AMLO con banda presidencial.
Sin embargo, advierte, la verdadera marca de López Obrador se verá en unos años y tendrá que ser el cumplimiento de sus promesas y un México mejor.
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Agencia Reforma
