Quienes han tenido la fortuna de visitar la reserva de la biosfera, ubicada al norte del estado de Querétaro, subrayan que tanto el vértigo como el mareo suelen convertirse en compañeros de aventura. Sin embargo, también comentan que los paisajes vistos a lo largo del trayecto colman el alma y la vista.

La naturaleza que rodea a esta región, decretada como reserva de la biosfera en 1997, es ideal para practicar turismo carretero, fotográfico y ecosustentable.

El área es tan rica como fascinante e incluye paisajes desérticos, bosques tropicales, cascadas, ríos, cuevas y sumideros, entre otras maravillas. De acuerdo con la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas, la reserva de la biosfera Sierra Gorda es la más diversa en ecosistemas del país.

Hasta ahí llegan quienes además de desconectar de las tensiones cotidianas para conectar con la naturaleza, desean realizar —de manera responsable— actividades ecoturísticas como excursionismo, senderismo y cañonismo, entre otras.

Hay que decir que los apasionados al turismo cultural también tienen cabida, ya que este edén serrano arropa a las cinco misiones franciscanas que forman parte del Patrimonio Cultural de la Humanidad, por la Unesco: Jalpan, Tancoyol, Landa, Tilaco y San Miguel Concá.

Acudir a la guía de los expertos es recomendable para hallar las joyas que resguarda este destino; pero los trotamundos que optan por seguir itinerarios propios suelen tomar como base Jalpan de Serra, Pueblo Mágico considerado el corazón de la Sierra.

Sin duda, en este paraíso natural de México hay varios recovecos por hallar. El Mirador Cuatro Palos, por ejemplo, regala una de las postales más memorables. Otro de los spots más buscados es la Puerta del Cielo. Además de estar en una de las zonas más altas, se llama así porque esta parte del camino está flanqueada por unos cerros y, quienes pasan por ahí, tienen la sensación de dirigirse al infinito.

Al visitar el poblado de Pinal de Amoles se observan casas con tejados rojos, balcones con vistas a la serranía y acogedoras calles que invitan a descansar.

En ningún itinerario puede faltar la visita al río Escanela, al Cañón de la Angostura, a la famosa cueva semiabierta con estalactitas bautizada como el Puente de Dios y a la cascada El Chuveje, cuya caída de poco más de 30 metros de altura salpica ánimo y frescor.

Que nadie lo dude, el recorrido que serpentea por la Sierra Gorda regala bellos momentos de vida.

Para saber

Las cinco Misiones Franciscanas son prueba del sincretismo entre los pueblos chichimecas y la Colonia española durante la última etapa del proceso de evangelización iniciado por fray Junípero Serra, dentro de la Sierra Gorda. Estas construcciones destacan por su valor arquitectónico y cultural y nutren los recorridos ecoturísticos por esta zona del país. Para más inspiración navega por www.queretaro.travel

Staff I Agencia Reforma

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