La apertura de puertas para mostrarse ante la mirada de todos solo duró dos días con Alberto Coyote, nuevo pastor del Guadalajara, quien ayer optó por dirigir un trabajo táctico con el equipo sobre la cancha del estadio Akron.
El estratega se encerró en la fortaleza rojiblanca con sus jugadores para comenzar a ensayar la formación que pondrá el sábado ante los Lobos BUAP, en el primero de los cinco partidos que le quedan a su corto proceso, para intentar volver a la zona de liguilla.
Decidirá si Alan Pulido aparecerá de nuevo con la formación titular, en la línea de tres delanteros que pondrá frente al equipo licántropo.
Los únicos jugadores descartados para el chiverío son el lateral izquierdo Miguel Ponce, quien sigue en recuperación de una pubalgia, además del delantero Carlos Cisneros, quien deberá parar por los próximos seis meses para rehabilitarse de una fractura por estrés en el peroné.
Las Chivas se han enfrentado en cinco ocasiones a los Lobos BUAP desde que esta franquicia ascendió a primera. Los rojiblancos mantienen un dominio de tres victorias, un empate y solo
una derrota.
Ramón Estrada I Agencia Reforma
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