Mac Jones no se cansa de ganar fuera de casa. Anoche, la víctima fueron los Halcones de Atlanta, que se desfondaron en el ultimo cuarto.

Nueva Inglaterra blanqueó 25-0 a Atlanta (4-6) para colocarse con marca de 7-4 y así meterle presión a los Bills de Búfalo (6-3) en la pelea por la cima del Este de la AFC.

El joven quarterback demostró su calidad y colocó su nombre en la historia, pues se convirtió, junto con Dak Prescott (6 en 2016) y Ben Roethlisberger (6 en 2004), como los únicos pasadores que han ganado sus primeros cinco duelos de visita en su temporada de novatos.

Jones, quien fue apoyado por su defensiva, lanzó para 207 yardas, conectó 22 de 26 pases, y sumó un pase de touchdown y una intercepción.

Del otro lado, Matt Ryan no dio una. El experimentado quarterback fue interceptado en dos ocasiones y apenas sumó 153 yardas. Peor aún, en la segunda mitad lanzó desganado, provocando un par de intercepciones, y el head coach de Atlanta, Arthur Smith, optó por darle algunas jugadas a los dos QBs de respaldo.

El problema es que Josh Rosen y Felipe Frank resultaron peores. En menos de cuatro minutos, los dos sufrieron intercepciones.

Los Pats acumularon más de 100 yardas por tierra, gracias a Reamondre Stevenson (69 yardas) y Damien Harris (56).

La ofensiva de Atlanta sencillamente no carburó: consiguieron apenas 165 yardas totales, por 310 de los Pats, en una triste actuación de Jueves por la Noche.

Diego Martínez
Agencia Reforma