Staff I Agencia Reforma

Un gol de bandera de Gareth Bale consolidó la dinastía del Real Madrid con su tercera Champions League en fila, todas dirigidas por Zinedine Zidane, y treceava de la historia.
Si Zidane era recordado por su volea ante el Bayer Leverkusen, ahora Gareth Bale se tiró una chilena para encaminar el 3-1 sobre el Liverpool en la Final de la Liga de Campeones de Europa en Kiev.

Al minuto 64, el galés, quien había ingresado de cambio, enganchó con la zurda el esférico causando que Zizou sacudiera el brazo derecho sin creer lo que
había presenciado.

Un gol inolvidable para un partido inolvidable. Primero por un primer tiempo con un Liverpool incesante pero que se desdibujó al 31’ cuando Mohamed Salah, autor de 44 goles en la campaña, salió lesionado del hombro izquierdo, tras una llave que le hizo Sergio Ramos, cuya intención fue debate entre los aficionados en redes sociales.

El egipcio dejó el campo entre lágrimas, misma situación que vivió minutos después Dani Carvajal por una torcedura de tobillo.

Para el complemento, primero tocó la puerta el Madrid con un remate de Isco que se estrelló en el travesaño.

Al 51’, Loris Karius cometió uno de los osos más grandes en la historia de la Champions cuando intentó salir rápido de manos, pero no se percató de que Benzema podía alcanzar el esférico, mismo que fue desviado por el francés para abrir el marcador.

Poco duro el gusto para los Merengues y el golpe para los Reds, ya que Sadio Mané al 55’ puso el 1-1, con una gran anticipación a Keylor Navas en un tiro de esquina.

Aunado a ello, Bale, firmaría su doblete gracias a otro error de Karius, a quien se le escapó el balón ante un tiro lejano de Gareth.

Los Merengues han reinado en Europa en 1956, 1957, 1958, 1959, 1960, 1962, 1964, 1966, 1981, 1998, 2000, 2002, 2014, 2016, 2017 y 2018, ésta última que le valdrá disputar el Mundial de Clubes, mismo que se va a celebrar en diciembre.