El subsecretario de Población, Migración y Asuntos Religiosos de las Secretaría de Gobernación, Humberto Roque, reveló la intención de armonizar distintas bases de datos del gobierno federal para avanzar en el proyecto de la Clave Única de Identidad.

“El paso que creemos que nos puede dar un gran brinco es si logramos que las instituciones que tienen el mayor número de biométricos, que pueden ser el Seguro Social (IMSS), el SAT, Plataforma México”, (se coordinen con nosotros) y logremos garantizar que podamos comunicarnos un sistema con otro.
“Antes de que culmine el año estaremos garantizando el trabajo, ya formal, cuando menos con el Seguro Social y Plataforma México, (sobre) la clave. No es sencillo, pero esa es la parte que estamos explorando para llegar a la Clave
Única”, dijo.
Entrevistado en la Secretaría de Gobernación, el subsecretario estimó que la armonización de dichas bases permitiría a la dependencia arrancar el proyecto formalmente con 15 y 20 millones de registros.
Roque mencionó que a estos registros se “incrustarían” posteriormente aquellos que la Segob recabó el sexenio pasado de menores de edad, y que ya fueron depurados durante la administración del gobierno federal actual.
En el sexenio pasado se tomaron las diez huellas dactilares, imagen del iris y fotografías del rostro de 6.8 millones de menores de edad, como parte del programa de cédula de identidad, que quedó inconcluso y fue cancelado por el gobierno de Enrique Peña Nieto. Con los datos biométricos, la dependencia federal elaboró 3.5 millones de cédulas, credenciales con la fotografía, nombre y CURP del menor, aunque sólo entregó 1.8 millones y embodegó 1.7 millones, señaló el funcionario.