Emilio Lozoya, exdirector de Pemex, continuará preso en el Reclusorio Norte por el caso Odebrecht.
El juez de control Artemio Zúñiga resolvió que la Fiscalía General de la República (FGR) acreditó que el exfuncionario cuenta con los antecedentes procesales, los recursos económicos y redes familiares para suponer que puede darse a la fuga.
Para el juzgador del Centro de Justicia Penal Federal del Reclusorio Norte, la FGR probó que cambiaron las condiciones objetivas que en julio de 2020 permitieron que Lozoya pudiera gozar de la libertad provisional con un brazalete electrónico y bajo otras medidas cautelares.
“Es infundado el argumento de que el imputado no quiso sustraerse de la justicia, cuando en realidad se necesitó de una orden de aprehensión en la que quedó justificada su necesidad de cautela e, incluso, fue necesaria la extradición para conducirlo a proceso”, dijo el juez.
“Se considera que otra medida cautelar distinta a la prisión preventiva justificada no va a garantizar que el imputado comparezca en el proceso”.
La audiencia se celebró a petición de Isabel Porras, titular del Tercer Tribunal Unitario, para que el juez se volviera a pronunciar sobre la medida cautelar de Lozoya, porque la prisión preventiva dictada el pasado 3 de noviembre violaba su derecho a la legalidad.
Ayer, el juez Zúñiga estimó que las condiciones que justificaban el encarcelamiento del exdirector de Pemex habían variado. Recordó que en la audiencia de noviembre pasado, la FGR presentó nuevos datos que acreditan que Lozoya tiene recursos de sobra para darse a la fuga.
El juzgador abundó sobre la información que proporcionó el Principado de Liechtenstein y en la que se detalla que Lozoya era accionista de JF Holding SA y que esta empresa tenía una cuenta bancaria en ese país con 2 millones de euros.
Añadió que el exdirector de Pemex cuenta con las redes familiares que le pueden facilitar su evasión y ocultamiento, porque su esposa Marielle Helene Eckes, sus hijos y su familia política son ciudadanos alemanes y viven en ese país europeo.
Adicionalmente, mencionó que la familia de su esposa es dueña de Eckes-Granini Deutschland, una de las mayores empresas de jugos y bebidas procesadas en Europa.
Abel Barajas I Agencia Reforma
