La deforestación de bosques y la tala clandestina es un problema que sigue aumentando en diferentes partes de la Sierra Otomí-Tepehua, lo que ha ocasionado cambio en el clima y que se pierdan los hábitats para la flora y fauna local, informó el biólogo Víctor Manuel Segura Cedillo.
El especialista reconoció que actualmente es más común ver en las montañas espacios que lentamente son deforestados, no solo para la transformación de suelos para la ganadería o los monocultivos, sino, ahora con mayor impacto, a causa de la venta de maderas, como pino, oyamel, encino.
“Las personas no lo ven como un problema real ya que la región posee una biodiversidad impresionante y prevalecen o, a pesar de las circunstancias, se logran adaptar especies. Sin embargo, el problema está y debemos manifestarlo hasta solucionarlo y generar ese sentido de cuidado en las nuevas generaciones, principalmente”, comentó Segura Cedillo.
Afirmó que durante los últimos ocho años ha notado una variación de climas y temporadas de lluvias que ha descontrolado los cultivos, principalmente del café, en San Bartolo Tutotepec y Huehuetla, mientras que en Tenango de Doria las precipitaciones pluviales que se reportaban cubrían 80 por ciento del calendario anual; actualmente llegan a alcanzar 30 por ciento.
Vanessa E. Romero I Otomí-Tepehua