El gobierno municipal de Progreso de Obregón prohibió a cinco localidades pedir dinero por varios conceptos que estaban dentro de sus formas de organización interna y de sus usos y costumbres, pues, incluso, se dio a conocer que las autoridades comunales cobraban las faenas a la ciudadanía.
Las zonas implicadas en este caso son El Bondho, La Ranchería, Xochitlán, El Moreno y El Jardín, cuyos delegados fueron advertidos por la alcaldía para no solicitar efectivo en el trámite de constancias de radicación, de identidad, permisos para la conexión a la red de agua potable, uso del sello, entre otros.
Los ciudadanos que no cumplan con la realización de faenas comunitarias no están obligados a pagarlas, señaló la presidencia municipal, además de que se precisó que los cobros por los servicios únicamente es atribución del gobierno de Progreso de Obregón.
En el documento emitido por el ayuntamiento se enfatizó que los pagos para los conceptos antes mencionados están incluidos dentro del Presupuesto de Ingresos de este año, por lo que se advirtió que los delegados no están facultados para tal efecto.
En meses pasados, como parte de este mismo problema, el alcalde Armando Mera Olguín anunció que la presidencia se haría cargo del panteón La Cruz, el cual se encuentra en manos de un comité ciudadano conformado por varias comunidades y que “históricamente así se ha administrado”.
Además, el edil solicitó una auditoría a la antreior gestión de la delegación de Xochitlán, derivado de los cobros que se hacían por el uso del cementerio; en respuesta, vecinos del sector aseveraron que han sido los habitantes quienes han encabezado el organismo.
Antonio Reyes | Progreso de Obregón