La estrella del pop británico Elton John compareció este lunes, por videoconferencia, como testigo de la defensa en el juicio contra el actor estadunidense Kevin Spacey, procesado en Londres por agresiones sexuales a varios hombres.

Spacey, que es juzgado en Inglaterra desde finales de junio, se declaró inocente de 12 cargos de agresión sexual a cuatro hombres entre 2001 y 2013, principalmente a partir de 2004, cuando era director del teatro Old Vic de Londres.

Uno de ellos lo acusó de agredirlo sexualmente mientras lo llevaba en coche a una gala benéfica en casa de Elton John “a principios de la década de los 2000. ‘Me agarró tan fuerte (los genitales) que casi me salgo de la carretera’”, afirmó.

El actor había dicho previamente al tribunal que eso “nunca ocurrió”, sino que ambos habían estado coqueteando.

“Fue un gesto suave (…) y estaba en mi espíritu romántico”, había replicado Spacey, negando cualquier comportamiento “violento”, “agresivo” o “doloroso”.

En videoconferencia desde Mónaco, Elton John confirmó que Spacey asistió a su baile anual en Windsor, a principios de los años 2000.

“Llegó con corbata blanca”, dijo el cantante.

“Llegó en jet privado y vino directamente al baile”, añadió, asegurando que el actor había dormido en su casa aquella noche.

El marido de Elton John, el cineasta David Furnish, también testificó sobre la presencia de Spacey en el evento: “era un actor recompensado con el Oscar, había mucha expectación por su presencia”.

“Aparte de asistir al baile, no recuerdo que Kevin volviera a venir a casa”, añadió.

Spacey, vestido con traje gris y corbata de lunares, se mostró emocionado el lunes, frotándose los ojos mientras el tribunal escuchaba las declaraciones de amigos y familiares.

El actor Robert Sean Leonard, conocido por la serie de televisión House y la película El club de los poetas muertos, lo describió como “positivo, comprensivo y respetuoso”.

Chris Lemmon, hijo del legendario Jack Lemmon, actor de Con faldas y a lo loco, aseguró que su padre consideraba a Spacey “como otro hijo”.

La semana pasada, el estadunidense negó todos los cargos, afirmando que fueron todas relaciones “consentidas” y calificando de débiles los argumentos de la acusación.

El juicio debe durar un mes y de ser declarado culpable podría ser condenado hasta a cadena perpetua.

AFP | Londres