México no cuenta con suficientes investigaciones epidemiológicas que sean oportunas, confiables, completas, de parte de todas las instancias de salud, tanto públicas como privadas. Los datos que se presentan en su mayoría son generados en los Estados Unidos, lo cual no representa a la población mexicana y sus necesidades. Razón que pone entredicho al actual sector salud de nuestro país.

“ Basta consultar la información del área epidemiológica que maneja la Secretaría de Salud en su página: https://www.gob.mx/salud/acciones-y-programas/informacion-epidemiologica, con datos de dos o más años de retraso, y solo de algunas enfermedades. México requiere información epidemiológica de toda las instancias, desde hospitales públicos como privados, de todas las enfermedades que aquejan a la población, lo mismo de los indígenas del sureste, como del norte, de los afro-mexicanos, de los judíos, los mestizos y de los blancos y extranjeros, pues cada uno de estos grupos tiene fenotipos y por ende necesidades distintas y específicas, si no conoces a tu población, es difícil decir en que se puede invertir y a que dar prioridad” así lo dio a conocer en entrevista exclusiva: Alma Dzib-Goodin, doctora en Neurociencia por la Universidad de Moscú.

“ No es posible continuar con estudios con poblaciones específicas, con pocos datos y que solo cuentan historias de centros de Centros de Salud en donde los investigadores laboran, México merece datos de la población general con cifras reales en tiempo reales, y no solo de unas cuantas poblaciones. El siguiente reto es tener un centro de control de enfermedades al día, y no con años de distancia. Reconocer brotes epidemiológicos al momento, y compartirlos a nivel nacional, que permita alertar a la población y prevenir problemas mayores” explicó.

“ En tal sentido, cuando se conocen las necesidades específicas en un país, es posible la prevención. En México el costo en los servicios de salud es enormes porque se dedica a curar enfermedades, pues no existen programas de prevención de enfermedades desde las primeras etapas de vida, que permitan evitar gastos mayores. Si quiere copiar modelos de otros países, debería apreciar los programas preventivos de salud de Australia, Estados Unidos y Francia, donde la promoción de la salud beneficia no solo económicamente a la población, sino que promueve una mejor calidad de vida”.

Alma Dzib, Directora de Learning and Neuro-development Research Center USA, afirmó que: “ Otro reto, para el nuevo gobierno que encabezará Andrés Manuel López Obrador, son las enfermedades genéticas, y neurodegenerativas que en muchos casos son prevenibles, que desafortunadamente el Instituto Nacional de Medicina Genómica aún no
está aportando mucho a la población más allá de publicar artículos”… “Es importante que se involucre con la población en general y que comience a hacer estudios a nivel nacional identificando poblaciones, enfermedades, grupos de riesgo, elementos ambientales, de alimentación y de vida que permitan crear acciones que prevengan problemas, para que, en conjunto con la Secretaría de Salud, dibuje un México sano. Crear programas preventivos que se integren en los libros de texto de los niños, en las poblaciones de riesgo y en las empresas que comiencen a promover acciones
concretas de salud como parte de la cultural social
en México”.

Fernando Fuentes