Alrededor de 200 personas, en su mayoría ataviadas de blanco, marcharon en Tizayuca para exigir justicia y esclarecimiento a las investigaciones en torno a los casos de desaparición forzada y feminicidios en este municipio e Hidalgo.
Según la Procuraduría General de Justicia de Hidalgo (PGJH), durante este año se han iniciado 14 carpetas de investigación por posible feminicidio, cuatro de ellas en Tizayuca, de acuerdo con inconformes que acudieron a la protesta.
A las 12:30 horas, el contingente partió de la tienda Soriana rumbo a la explanada municipal, donde emitieron consignas contra el gobierno, con pancartas reivindicativas que simbolizaban a las mujeres fallecidas, cuyos lemas decían “Hoy grito por todas a las que se ha silenciado”, “Queremos salir tituladas, no asesinadas” y “¡Ni una más!”.
Pobladores de Tolcayuca se sumaron a la marcha; esa localidad registró un caso de probable feminicidio el pasado martes: Noemí H. fue hallada sin vida a orillas del Arco Norte.
Tras el recorrido de una hora, los manifestantes exigieron afuera del ayuntamiento que el alcalde Gabriel García Rojas y la titular del DIF municipal, Juana García Rojas, hagan hincapié en los delitos que aquejan al municipio, relacionados con la violencia privativa hacia la mujer; posteriormente, en un templete, los participantes compartieron testimonios de desaparición y la omisión de las autoridades para resolver los casos.
María Hernández Chávez, quien participó en la movilización, dijo a Criterio que Tizayuca registra cuatro casos de feminicidios en lo que va del año y mencionó que Hidalgo ocupa el lugar 15 a nivel nacional en delitos de esta índole.
Por su parte, Rocío Alicia Pérez Segura, suegra de Javier M, desaparecido el pasado 7 de marzo, señaló que hubo omisión de las autoridades municipales para esclarecer el caso.
“Es alarmante la situación aquí en Tizayuca; exigimos el apoyo del alcalde y de la diputada –Susana Ángeles Quezada– pero no tuvimos respuesta”, dijo.
Indicó que su pariente desapareció mientras entregaba un pedido de alimentos en Tonanitla, Estado de México, junto a un acompañante que fue encontrado muerto tres semanas después. Refirió que, pese a su recorrido en diversos servicios médicos forenses (Semefo) colindantes con Tizayuca, desconoce el paradero de su yerno.
Alfonso Marín I Tizayuca
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