Ramón Estrada I Reforma

Para continuar marcando distancia de la atención local, el plantel del Guadalajara regresó ayer a los entrenamientos en Verde Valle, para planificar el segundo juego de la jornada doble de esta semana.

Después de rescatar el empate de último momento ante el Querétaro, ahora las Chivas volverán a su estadio para recibir el sábado al Pachuca.

Aunque el chiverío sigue sin ganar frente a su afición y apenas lleva un triunfo en lo que va del 2018, el punto conseguido ante los Gallos no sólo les trajo tranquilidad, sino optimismo de que ante los Tuzos podrían enderezar por completo el rumbo.

Matías Almeyda dirigió una breve charla con sus jugadores antes de iniciar la sesión, después junto con sus auxiliares coordinó una práctica de futbol con los elementos que no jugaron el miércoles, mientras que los titulares, hicieron ejercicios regenerativos con trote en la cancha, elongaciones en el gimnasio y algunos otros en la tina de masaje.

El Pelado dirigirá el trabajo táctico también a puerta cerrada este viernes, para definir o sostener a la misma formación titular con la que pretende enfrentar a los Tuzos.

Las Chivas llegaron a cinco puntos y subieron al lugar 16 de la tabla al culminar la fecha 7 al tener mejor diferencia de goles que los Lobos BUAP.