Que a quien se le cayó el negocio con las licencias de funcionamiento de Pachuca es al regidor Yuseb Yong, pues dicen que pedía su moche por la autorización y liberación de las placas, como en el caso del bar Don Diablo; el Cabildo dio revés al edil tras detectar tales anomalías. Ahora empresarios se organizan para iniciar una serie de demandas contra el asambleísta, ya que no les podrá devolver lo ya pagado por adelantado

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que el encuentro con organizaciones civiles al que convocó la legisladora Roxana Montealegre en la UAEH mostró serios problemas de logística. Algunos miembros de las ONG se fueron antes de que finalizara, ya que los citaron a las 11:00, pero el acto estaba programado para una hora después. Muchos salieron molestos, pues consideraron que el diálogo con la diputada federal Tatiana Clouthier fue reducido y que el coloquio solo sirvió para el lucimiento de la representante local.

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que el presidente municipal de Tlaxcoapan, Jovani Miguel León, es otro de los ediles investigados por estar involucrado con el negocio del huachicol, pues se sabe que una patrulla de Seguridad Pública municipal por las noches permanece cerca del puente de la comunidad Doxey para abanderar a los ordeñadores de ductos. El alcalde, afirman, sin inmutarse, protege esta ilícita actividad desde el inicio de su administración.

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que quien anda muy activo promocionándose es el exdiputado local, exaspirante a legislador federal por la vía plurinominal y dirigente del Partido Encuentro Social (PES), Daniel Andrade Zurutuza, pues aseguran que aprovechó la protesta de choferes del transporte público en la Huasteca, quienes exigen mejores condiciones viales, para decir que, ya sin curul, sigue cercano a la gente y siendo el mejor gestor que jamás haya conocido esa región. En tanto, los miembros de su partido continúan en la zozobra, pues aún no saben si perderán el registro nacional y si sobrevivirán como organismo local.

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que, tras imponerse de manera arbitraria como secretario general del Sindicato Único de Trabajadores y Empleados de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (SUTEUAEH), Jaime Galindo Jiménez destituyó a los delegados de las áreas académicas que no estuvieron de acuerdo con la forma en que manejó el proceso para prolongar su periodo al frente del organismo; sin embargo, debido a la molestia que generó entre los empleados, no le quedó más remedio que volverlos a nombrar como comisionados.