A través de un comunicado, pobladores y autoridades delegacionales de la comunidad El Palmar, Santiago de Anaya, acusaron al presidente municipal, Edigar Monter Ángeles, y a su secretario, Heblén Ángeles Hernández, de provocar confrontación y violencia, luego de que no fueran considerados en la distribución de agua potable por medio de pipas.

“Realizaron prácticas discriminatorias y deleznables en el suministro de agua que estuvieron realizando las pipas del ayuntamiento; se dio a negocios particulares y obras en construcción, negando el servicio a personas enfermas y de la tercera edad”, externaron en el documento.

Explicaron que el suministro del líquido se realizó solicitándoles sus credenciales de elector en original y copia, pues en caso de no entregar dichos documentos, les negaban el servicio. Estas acciones, externó, nunca habían ocurrido.

“Nos parece indignante que el ayuntamiento priorice el suministro del vital líquido a negocios particulares, autolavados y empresas, y condicione a los vecinos”, señala el comunicado.

Agregaron que el alcalde se negó a dialogar con una comisión de representantes y a recibir el oficio.

“Inclusive, vecinos y autoridades de otras comunidades, quienes también solicitaron audiencia, fueron rechazados e ignorados por el edil”, indicó uno de los inconformes.

Los quejosos recordaron que el presidente municipal ha generado conflictos al interior de la comunidad, los cuales han terminado en actos de violencia. Esto, luego que, a principios de este año, pretendió influir en el cambio de delegado.

Antonio Reyes I Santiago de Anaya

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