El pasado fin de semana, el usuario de Facebook Efrén Abrego sorprendió a la comunidad virtual al publicar una serie de fotografías fascinantes de las cuevas de Tlanchinol, revelando la presencia de un esqueleto de un animal.
Las imágenes se volvieron virales rápidamente, desencadenando un sinfín de reacciones y especulaciones en internet sobre el origen de los huesos. Algunas páginas incluso afirmaron, sin fundamentos científicos, que se trataba de fósiles prehistóricos.
No obstante, la verdad detrás de esta intrigante osamenta ha sido desvelada por expertos. El esqueleto pertenece a un tlacuache, un marsupial que habitaba la región y que encontró su último reposo en las profundidades de esta impresionante cueva.
Curiosamente, este animal ha dado nombre al lugar, que ahora es conocido como la Cueva del Tlacuache.
La caverna es un sistema de cuevas excepcionalmente bien preservado, alejado de la intervención humana, lo que ha permitido la conservación de su rica biodiversidad y valiosos vestigios arqueológicos.
Ante esto, se solicita encarecidamente a la población no realizar visitas recreativas para garantizar la preservación adecuada del sitio y su investigación científica.
La Cueva del Tlacuache se ha convertido en un punto de interés para científicos y amantes de la naturaleza por igual.
Redacción | Tlanchinol
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Metztitlán, un encantador municipio en el estado de Hidalgo, ha sido recientemente designado como Pueblo Mágico por la Secretaría de Turismo de México.
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