3 Niños y padres de familia tomaron el Río de las Avenidas para acompañar el recorrido de la caravana navideña que recorrió esta vialidad, que lució abarrotada.
Ni el frío, ni la espera de más de dos horas que demoró en pasar el convoy, minó el ánimo de miles de habitantes que, si bien en su mayoría eran originarios de Pachuca, también acudieron provenientes de municipios cercanos como Mineral del Monte, Epazoyucan, San Agustín Tlaxiaca, Zempoala y Mineral de la Reforma.
La caravana partió del bulevar Río de las Avenidas, casi esquina con bulevar Colosio, para recorrer una distancia de siete kilómetros hasta la Rotonda de los Hidalguenses Ilustres y de vuelta al punto de partida.
Bajo el concepto de Abre tu corazón, se dejaron ver siete camiones iluminados con motivos navideños, representando la denominada fábrica de la felicidad de la trasnacional Coca-Cola, donde se trasladaban desde los populares osos polares que han posicionado a la marca, hasta una fábrica de robots, de muñecas y de dulces.
La mayor expectación fue causada por el camión que transportó al clásico Santa Claus, al que los niños no dudaron en gritar sus deseos de regalos para esta temporada, aunque, claro, sin olvidar la tradicional carta.
En el Río de las Avenidas vendedores ambulantes hicieron su agosto con la venta de artículos navideños, como narices iluminadas, gorros, globos con motivos polares, pero también con frituras, incluidas palomitas de maíz que inundaron con su aroma el lugar.
Fueron siete años que esta caravana tardó en volver a engalanar el ambiente navideño de la capital del estado.