En los últimos dos años, en Hidalgo alrededor de 150 familias han recibido recomendaciones de desalojo, debido a que habitan en barrancas y laderas inestables, informó Miguel García Conde Subsecretario de Protección Civil de la entidad.
Según el servidor público, en alrededor de 40 por ciento de los casos, las familias afectadas han cambiado su residencia a lugares más seguros, mientras que 60 por ciento aún permanece en riesgo por fenómenos como deslaves y derrumbes.
El funcionario mencionó que la sierra Otomí-Tepehua y la Huasteca concentran el mayor número de familias en riesgo, mientras que el Valle del Mezquital y el Altiplano son las regiones que tienen el menor número de viviendas en zonas inestables, aunque no precisó la cantidad.
García expuso que en Pachuca, Cubitos, LaRaza, El Arbolito, La Minerva, colonia Guadalupe, entre otras, a través del Servicio Geológico Mexicano (SGM) se realiza un monitoreo constante sobre los tiros de mina en los que están asentadas las casas.
“Las minas ya estaban cuando se construyeron las viviendas y se urbanizó; lo más importante es estar atentos a cualquier incidente. Que se entienda: si hay que hacer desalojo, lo vamos a hacer”.