La apnea del sueño, mejor conocida como roncar, es una afección que se presenta en una de cada 10 personas en el país, que además de generar molestia por el ruido que produce, evita la oxigenación correcta de los órganos del cuerpo, impidiendo un descanso placentero y reparador, dando como resultado un estrés constante en el paciente, explicó el doctor Alejandro Arreola Morales, médico internista y neumólogo, adscrito al Hospital Doctora Columba Osorio, del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste).

Entre las enfermedades o alteraciones en el individuo relacionadas con la falta de sueño se enlista el aumento o descontrol de la diabetes, al igual que la hipertensión, el colesterol o los lípidos, alteraciones en la coagulación que pueden generar los infartos, embolias, trombosis, todo debido a no respirar de manera adecuada al dormir.

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“Todo trastorno del sueño va a generar trastornos neurológicos y de oxigenación o de falta de oxigenación, el solo hecho de que la apnea del sueño le genere ronquido al paciente hace que la fase 3 y 4 de REM del sueño profundo no llegue completa en el individuo, entonces el individuo que tiene apnea del sueño puede estar durmiendo 12 horas continuas, pero nunca llegar a esta fase de sueño profundo; entonces, nunca descansa”, explicó el especialista.

Una persona que no duerme de manera correcta despierta cansada, agotada, olvida las cosas, tiene falta de coordinación, está con mal humor, presenta dolores de cabeza al despertar, pues la falta de sueño y respiración dejan en modo de alerta al cerebro.

Aunque el paciente parezca totalmente dormido, el cerebro, continúa parcialmente despierto, generando alteraciones al día siguiente, que se pueden ir acrecentando de manera proporcional al tiempo que la afección no sea atendida y que pueden generar la muerte al quedarse dormidos en lugares o actividades, como manejar.

Los infartos cerebrales, al corazón o tromboembolias pulmonares son parte de los resultados fatales que el dormir poco o no tener un sueño de calidad generan, ya que la baja oxigenación genera coágulos en la sangre de manera acelerada, tapando las arterias del cerebro, corazón o pulmones, sumado a las comorbilidades, como la obesidad o malformaciones físicas, como la barbilla chica o prolongada, la lengua prominente, refirió el médico.