Mediante una denuncia ciudadana, padres de familia de un equipo de futbol infantil acusaron omisión por parte de la administración de una liga deportiva, luego de que en el partido de la final cayó un fuego pirotécnico a la cancha, lo que puso en riesgo a menores de entre seis y siete años que lo disputaban.

El 2 de septiembre, lo que parecía ser un encuentro entre las escuadras Warriors e Inter de Hidalgo, se convirtió en una zona de peligro, ya que la porra del segundo club acudió con petardos y bombas de humo al evento.

Te puede interesar Descartan expansión del crimen organizado en 20 municipios

Te puede interesar Tras video de “llave china” el CUC se pronuncia contra la violencia

De acuerdo con la denuncia de los padres del primer conjunto, en un momento del partido y por descuido de los padres del rival, uno de los artefactos explosivos cayó a la cancha, lo que puso en peligro a sus hijos, quienes, incluso, presentaron sordera temporal después del estruendo.

Por dicha situación, el juego fue suspendido por parte de los familiares del equipo afectado, ya que consideraron que no había garantías para continuar con el encuentro sin riesgo para sus pequeños.

Sin embargo, acusaron que la administración de la liga fue omisa en la situación, además de que señalaron que no se contaba con las salidas de emergencia en la cancha ubicada en la colonia Puerta de Hierro ni las precauciones necesarias para alguna eventualidad.

En el video al que Criterio tuvo acceso, se pudo observar como el proyectil cayó cerca de un niño, el cual no resultó con lesiones graves, aunque solo sufrió leves quemaduras en la rodilla a causa del material incandescente.

No obstante, tanto él como el resto de sus compañeros presentaron algunas repercusiones psicológicas, por lo que pidieron a las autoridades municipales investigar esos hechos, por los cuales ya hay una denuncia penal contra quien resulte responsable.

“Suspendieron temporalmente a la cancha por no tener permisos para nada, incluso vendían alcohol de manera indiscriminada, pero volvió a funcionar en unos días”, comentó uno de los quejosos.

De igual manera, pidieron sanciones para los participantes en el hecho, además de que asintieron que se busca generar un precedente para acabar con esas prácticas en eventos infantiles, pues consideraron que “dejarlo pasar significa normalizar estas actitudes”.

Luis Godínez | Pachuca