Tras obtener la abreviación de su proceso legal por peculado y uso indebido de sus atribuciones, este miércoles por la tarde el exalcalde de Pachuca, Eleazar García Sánchez, abandonó el Centro de Readaptación Social (Cereso) de Pachuca, tras pagar 11 millones de pesos y una propiedad como reparación del daño.

Tras ser arrestado el pasado 3 de febrero, el exedil de la capital hidalguense, García Sánchez, por fin obtuvo su libertad, luego de reparar el daño del que se le acusó por malversificar más de 37 millones de pesos durante su gestión municipal de 2012 a 2016.

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Fuentes informaron a Criterio que la pena a la que fue sometido el expresidente emanado del Partido Revolucionario Institucional (PRI) fue conmutativa, por lo que podía pagarla con el recurso económico, servicio social o bien con meses de arresto, por lo que eligió la primera opción.

De acuerdo con información que envió la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH), Eleazar recibió dos penalidades, una por diez meses con 20 días de presión y la otra por tres años con cuatro meses encarcelado.

Como reparación del daño, optó por pagar 11 millones de pesos, además de la transferencia de un predio a la administración pública a la cual infligió el daño.

Fueron 12 los convenios que firmó sin la autorización del cabildo capitalino y por los cuales se le juzgó, mismos que en total dieron un acumulado de 37 millones de pesos que no se transparentaron.

Aunado a ello, se le acusó de firmar otros contratos por más de 22 millones de pesos por concepto de publicidad con la empresa Publirex.