En un estudio reciente realizado por la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), se descubrió que varios productos de pan de linaza, centeno y salvado en realidad no contienen los ingredientes principales que afirman tener en sus etiquetas. Según el titular de la Profeco, David Aguilar Romero, esta revelación se hará pública en la próxima edición de la Revista Profeco, programada para abril.

El estudio se centró en 46 diferentes presentaciones de pan de caja, incluyendo variedades como multigrano, masa madre, integrales, de trigo, centeno, linaza con gluten y blanco. Los criterios de evaluación se basaron en ocho características nutricionales clave por cada 100 gramos de producto, como los azúcares totales, sodio, calidad sanitaria, contenido energético, calorías y cantidad de proteínas.

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Uno de los hallazgos más preocupantes es que algunos panes resaltan ingredientes que apenas contienen o que ni siquiera están presentes en la cantidad que sugiere su etiqueta. Por ejemplo, el pan etiquetado como “pan de linaza” del Molino Blanco de Mateo tiene la linaza como décimo ingrediente en su lista. Del mismo modo, el Fiiller pan de centeno y cebolla presenta la harina de centeno como tercer ingrediente, mientras que el Fiiller pan de centeno ligero con ajonjolí en realidad está hecho principalmente de trigo, no de centeno como indica su nombre.

Otro caso destacado es el Pan Europeo artesanal, que se anuncia como “pan de salvado integral”, pero el salvado figura en tercer lugar en su lista de ingredientes, siendo la base principal el trigo. Además, esta marca presenta leyendas en su empaque que no están respaldadas por evidencia, como “alto valor nutricional” y “alto en fibra”, sin demostrar estas afirmaciones.

En cuanto al exceso de sodio, cuatro productos identificados no cumplen con la normativa al no incluir el sello correspondiente:

Fiiller, pan rebanado con bigrano

Fiiller, pan negro tipo rústico

Fiiller, pan de centeno con linaza

Lecaroz, pan de caja multigran

A pesar de estos hallazgos, la marca Bimbo fue destacada por respetar el orden de los ingredientes en sus etiquetas, según el estudio de Profeco.

Ante estas irregularidades, se ha instado a los productores de los panes identificados a reetiquetar sus productos para evitar proporcionar información falsa a los consumidores. Aguilar Romero enfatizó que de no cumplir con esta solicitud, se procederá al retiro de dichos productos del mercado para proteger los derechos de los consumidores.