El canal de riego donde explotó el poliducto Tuxpan-Tula el pasado 18 de enero en San Primitivo, Tlahuelilpan, resultó con niveles altos de contaminación en 27 pruebas de suelo efectuadas en la zona, informó la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) en un comunicado.
De los resultados del análisis de las muestras recolectadas se desprendió que el área está impactada por hidrocarburos totales del petróleo en su fracción ligera y BTEX (benceno, tolueno, etilbenceno y xileno), contaminantes establecidos en la norma NOM-138-SEMARNAT/SSA1-2012.
Mientras que en el parcelas o sembradíos, la dependencia federal precisó que los niveles de contaminación no rebasan los límites máximos permisibles establecidos por la reglamentación de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales de Hidalgo (Semarnath).
Criterio publicó el 3 de febrero que personal de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) realizó un levantamiento topográfico en la parcela donde ocurrió la explosión, para que la canaleta de riego sea desviada y en el lugar se construya un monumento a las víctimas: 135 hasta ahora.
Sin embargo, además de modificar la canaleta, se tienen que realizar trámites para edificar un monumento, ya que el terreno tiene dueño. Por el momento, los deudos han colocado flores y cruces.
La Profepa advirtió en el comunicado que, según los especialistas, el suelo es capaz de admitir una serie de alteraciones si no rebasan los límites a su propia capacidad de asimilación.
Los efectos desfavorables son la disminución del rendimiento de los cultivos y contaminación freática por procesos de transferencia del suelo al subsuelo.
Nathali González
Tlahuelilpan
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