Mary Loren Hernández Asencio señaló que ella y su hija viven con miedo por amenazas que reciben de parte de Diana Marroquín Bayardo y su hermana Claudia Marlén. “Lo único que pido es que se haga justicia. Mi hija está viviendo sin tener una vida normal como adolescente, vivimos en un cuarto de cuatro por cuatro porque nos tienen amenazadas de muerte. No podemos salir a la esquina, eso no es vida, yo no soy una delincuente”, acusó.

Lo anterior, declaró la víctima, luego de la primera audiencia de impugnación de la resolución del Ministerio Público que se realizó ayer miércoles en los juzgados de control del distrito de Tulancingo por los delitos de lesiones y amenazas (44-2018, Nuc 18-2017-HG1326), que presuntamente cometió Claudia Marlén Marroquín Bayardo contra Hernández Asencio y su familiar. La afectada sostuvo en entrevista con Criterio que en noviembre del año pasado Claudia Marlén la golpeó con una pistola en la pierna e intentó llevarse a su hija.

“Mi hija tiene miedo, por eso en la audiencia tuvo que estar independiente en el área de testigo indefenso; aunque ya no es menor de edad, los estudios determinan que actúa como si lo fuera por el daño psicológico que tiene”.

“Estuve sola en la audiencia, pero con Claudia Marlén Marroquín Bayardo y su hermana estaban los ministerios públicos, y yo no tengo dinero para un abogado particular. En la reunión el juez permitió que Diana Laura Marroquín Bayardo llamara a mi hija prostituta y a mí, madrota”, señaló.

Por su parte, el juez Hugo Matadamas Barranco resolvió fijar nuevo día y hora de encuentro para el 19 de octubre, y determinó que la perjudicada sea asistida por la representación social de la defensa de la mujer.

Redacción l Tulancingo